Desde diciembre del año pasado, las Islas Baleares han sido escenario de una intensa operación por parte de la Guardia Civil y la Agencia Tributaria. ¿El objetivo? Controlar a esos 166 coches con matrícula extranjera que parecen olvidar las reglas del juego. Y es que, aunque suene a película de acción, esta historia es muy real y toca temas de fraude aduanero y fiscal.
Operativos que dejan huella
A lo largo de estos meses, se han llevado a cabo un total de 1.605 inspecciones, donde los agentes han estado al pie del cañón para detectar posibles infracciones o, simplemente, aquellos que prefieren jugar al escondite con sus obligaciones fiscales. La operación llamada Filtrocar busca asegurar que todos estos vehículos cumplan con los requisitos necesarios: desde el pago de impuestos hasta la documentación y el seguro en regla.
Y ojo, porque si vives aquí y tu coche lleva más de un mes circulando sin matricularse en España, te enfrentas a multas que van desde los 50 hasta los 150 euros por incumplir la Ley. Además, pueden incluso inmovilizarte el vehículo. Así que ya sabes: ¡más vale prevenir que curar! La Guardia Civil insiste en que si eres residente fiscal en España o tienes un establecimiento aquí, no puedes dejar tu coche fuera del sistema. Es hora de hacer las cosas bien y no tirar a la basura nuestras responsabilidades.