MADRID, 18 de junio. Las noticias desde el otro lado del océano no son nada alentadoras. Las autoridades de Estados Unidos han decidido cerrar su Embajada en Jerusalén, y no es una medida que se tome a la ligera. A partir de este miércoles y hasta el viernes, 20 de junio, también se verán afectados los Consulados en esa misma ciudad y en Tel Aviv. ¿El motivo? El preocupante cruce de ataques entre Israel e Irán que ha estallado desde el pasado viernes.
La seguridad ante todo
El Departamento de Estado ha dejado claro: «Dada la situación de seguridad y siguiendo las directrices del Comando del Frente Interno de Israel, nuestra Embajada permanecerá cerrada desde mañana hasta el viernes». Es un golpe duro para quienes tienen la esperanza puesta en un futuro más pacífico. Además, han emitido una alerta para todos los empleados del Gobierno estadounidense y sus familias que se encuentren en Israel, Cisjordania y Gaza, instándoles a permanecer en sus hogares hasta nuevo aviso.
Por si esto fuera poco, el aeropuerto Ben Gurión está cerrado; sin embargo, hay algunas opciones para salir del país: tres cruces terrestres hacia Jordania y uno hacia Egipto que permanece operativo todo el día. En cuanto a la situación actual del conflicto, Israel lanzó una serie de ataques contra instalaciones nucleares iraníes y zonas residenciales en Teherán, dejando tras de sí un trágico saldo: cerca de 225 muertos según Irán. Como respuesta, han disparado cientos de misiles hacia Israel, resultando al menos 24 fallecidos en territorio israelí.