La noche no parecía tener sorpresas en La Bonanova, pero todo cambió cuando un conductor de Uber, distraído por su móvil, perdió el control y terminó empotrado contra un muro. Sí, así de surrealista fue el incidente que tuvo lugar cerca de las doce, justo frente al Hotel Amic Horizonte.
El propio protagonista del accidente lo dejó claro cuando un curioso le preguntó qué había pasado: «Ha entrado una señal de Uber y he agachado la cabeza para mirarlo y a tomar por culo», confesó sin tapujos. Y aunque sus palabras reflejan una actitud casi despreocupada, el daño ya estaba hecho. Su Ford Capri quedó encajado en el muro, que no solo sufrió el impacto, sino que también se llevó por delante parte del mobiliario urbano.
Un caos momentáneo
La calle Francesc Vidal i Sureda tuvo que ser cortada para permitir que los equipos de Emergencia realizaran su trabajo. Las maniobras para retirar el vehículo fueron laboriosas, pero afortunadamente nadie salió herido; el conductor simplemente se fue caminando a casa tras darse cuenta del revuelo que había causado. Mientras tanto, la Policía Local recopilaba información para elaborar el atestado correspondiente y avisar a los propietarios de otros coches que también resultaron dañados.
Este tipo de incidentes nos recuerda lo importante que es estar siempre alerta al volante y no dejarse llevar por las distracciones modernas. Al final del día, todo puede cambiar con solo mirar hacia abajo unos segundos.