En un momento en que el debate sobre el uso del catalán se intensifica, el Consell Escolar de les Illes Balears ha alzado su voz con fuerza. No es solo un tema de idiomas; es una cuestión de identidad y derechos. La comunidad educativa, representada por este órgano, se ha plantado ante las autoridades para exigir la retirada del polémico Pla de segregació lingüística. Un plan que muchos consideran un ataque directo a nuestra lengua y cultura.
Un clamor que no cesa
Mientras tanto, en las calles se pueden ver camisetas verdes, símbolo de resistencia y unidad. En eventos recientes, como el homenaje a Carme Riera, estas camisetas han irrumpido con energía, recordándonos que hay quienes están dispuestos a luchar por lo que creen justo. “No tenemos miedo. Lo volveremos a hacer”, gritan desde la Xarxa Educativa per la Llengua, dejando claro que no se rendirán fácilmente.
A medida que avanzamos hacia un futuro incierto en materia cultural, la voz del rector de la UIB resuena con claridad: “Los poderes tienen el mandato de garantizar la normalización lingüística”. Y así es como debe ser; porque no se trata solo de palabras, sino de construir un espacio donde cada uno pueda expresarse sin miedo y sin barreras.