En una charla reciente en Japón, Andy Kohlberg, el presidente y propietario del Real Mallorca, dejó claro que la próxima temporada no se trata solo de sobrevivir. «Tenemos que aprender y mejorar porque el resto de equipos lo van a hacer«, aseguró con determinación. Este mensaje, cargado de ambición, busca inspirar a todos en el club a dar ese paso más hacia adelante.
La necesidad de cambiar la mentalidad
Kohlberg, quien ha estado presente en varios entrenamientos junto a Pablo Ortells, el director deportivo, enfatiza que es momento de dejar atrás esa mentalidad limitada que solo busca la permanencia. «No podemos seguir mirando hacia atrás. Debemos pensar en grande y esforzarnos cada día para estar arriba en la tabla«, afirma con convicción. Es un cambio radical respecto a años anteriores donde el objetivo parecía ser simplemente no caer al abismo.
A pesar de los retos y la presión por mejorar, Kohlberg destaca los logros obtenidos hasta ahora. «Si me dicen hace un año que acabaríamos décimos luchando por Europa, ¡hubiera sido feliz!», expresó con una sonrisa. Sin embargo, sabe que deben seguir avanzando; cada temporada es una oportunidad para crecer.
Mientras tanto, las decisiones sobre fichajes están aún en espera. Solo se ha concretado la renovación de Mateu Jaume, mientras otros jugadores todavía están pendientes de resolver su futuro. El entorno está tenso pero lleno de expectativas.
Kohlberg también subrayó la importancia del apoyo incondicional de los aficionados: «Apreciamos mucho su apoyo; hemos crecido gracias a ellos y queremos seguir haciéndolo«. Es un recordatorio claro de que el crecimiento del club va más allá del terreno de juego; se trata también de construir una comunidad fuerte alrededor del Mallorca.
En resumen, este próximo capítulo promete ser emocionante si todos trabajan juntos y mantienen esa mirada fija en lo alto. El desafío está servido: ¿estaremos listos para vivir una nueva era llena de posibilidades?