El Nottingham Forest ha decidido vetar la entrada de Gary Neville al partido contra el Chelsea, y esto ha levantado más de una ceja en el mundo del fútbol. ¿Por qué? Todo se remonta a unas declaraciones bastante mordaces que hizo el exjugador y actual comentarista sobre el dueño del club, Evangelos Marinakis. En su trabajo para ‘Sky Sports’, Neville no se cortó al criticar al propietario después de un incidente en el que Marinakis supuestamente le recriminó a Nuno Espírito Santo por el empate contra el Leicester City.
Una situación inusual y decepcionante
Lo que Neville denunció fue que, lejos de ser una simple conversación, la situación había sido malinterpretada por los dirigentes del Forest. Según él, la verdadera preocupación era la grave lesión abdominal sufrida por Taiwo Awoniyi, quien incluso tuvo que ser inducido en coma. Sin embargo, esta controversia ha llevado a que el club decidiera no permitirle acceder al City Ground este domingo.
No es común ver a un club tomar medidas tan drásticas. “He hecho críticas y alabanzas en mis 14 años en este trabajo y nunca había vivido una situación como esta”, comentó Neville en sus redes sociales. Y añadió: “Es decepcionante que un club tan grande como el Nottingham Forest haya tomado una decisión como ésta”. Aunque ellos tienen todo el derecho de decidir quién puede entrar a su estadio, esto refleja algo más profundo sobre lo ocurrido en los últimos meses dentro del club.
‘Sky Sports’ se ha puesto del lado de Neville y ha calificado esta acción como “sin precedentes”, anunciando que transmitirán el partido desde Londres para mostrar su apoyo. Sin duda, esta historia no solo habla de fútbol; nos recuerda cómo las palabras pueden abrir o cerrar puertas en este apasionante deporte.