A tan solo diez días de la Diada de Sant Jordi, esa fecha tan señalada para el mundo literario, el Gremi de Llibreters de Mallorca no puede ocultar su inquietud. La falta de acuerdo político ha dejado en el aire una subvención crucial que podría poner en jaque celebraciones como la Fira del Llibre y la Setmana del Llibre en Català. Miquel Ferrer, su presidente, lo dice claro: «Es hora de que las instituciones se comprometan con nuestra cultura».
Una situación alarmante para el sector
El pleno del Consell de Mallorca no aprobó hoy los 95.000 euros necesarios para seguir adelante con estas actividades, un golpe directo al corazón del tejido cultural local. Imagina lo que eso significa: menos oportunidades para editores, escritores y libreros. ¿De verdad queremos permitir que esto pase? Desde el gremio advierten que sin este apoyo, se verán comprometidas actividades esenciales. En sus palabras se refleja una profunda frustración: «La cultura necesita estabilidad y apoyo económico», añaden.
Y es que ya basta de parches y promesas vacías. La subvención lleva años congelada mientras los costes suben como la espuma. Ferrer hace un llamado a todos los responsables políticos: «Necesitamos una solución urgente». Si no se actúa ahora, perderemos mucho más que unas jornadas; estaremos tirando a la basura años de esfuerzo por fomentar las letras en nuestra comunidad.