La polémica no cesa. En un giro inesperado, Vox ha decidido recurrir a esas viejas estrategias de comunicación que tanto hemos visto a lo largo de los años, utilizando el miedo para vincular la migración con la delincuencia. Es como si estuviéramos atrapados en un bucle del pasado, donde las mismas tácticas se repiten sin tregua.
Una historia que no acaba
Mientras tanto, las Balears viven momentos complicados. La población ha comenzado a descender, y este dato nos debería hacer reflexionar sobre qué tipo de políticas estamos apoyando. A medida que los turistas llenan nuestras calles, muchos se preguntan: ¿realmente estamos cuidando nuestro hogar o simplemente lo estamos tirando a la basura?
No podemos ignorar voces críticas como la de Marta Roig, quien trasplantada de médula expresó: «Hice la Selectividad en el hospital y con una vía puesta». Su experiencia nos recuerda que hay más cosas en juego que simples estadísticas; hay vidas detrás de cada cifra.
A medida que miramos hacia el futuro, es esencial que cuestionemos estas narrativas simplistas que intentan dividirnos. ¿De verdad queremos seguir por este camino? Las comunidades merecen un debate serio y constructivo, no discursos vacíos cargados de temor.