En estos tiempos convulsos, donde los ecos de decisiones políticas resuenan en nuestras vidas cotidianas, parece que hay algo que no podemos ignorar. La caída de la demanda hacia Estados Unidos se hace palpable, y todos nos preguntamos: ¿es el efecto Trump el responsable? Las agencias de viajes están viendo cómo su negocio se tambalea, y eso nos afecta a todos.
Mientras tanto, en Palma, nos prepararnos para las tradicionales procesiones de Dimecres Sant. Pero no todo es fiesta; también tenemos cambios en las líneas de bus y calles cortadas que complican aún más nuestro día a día. ¿No sería mejor facilitar el acceso a estas tradiciones?
Nuevos vientos en los medios
Por otro lado, la situación en IB3 no mejora. La renuncia de Marisa Candia como directora de Mitjans Digitals es un golpe más para un medio ya debilitado. El futuro no pinta fácil cuando la confianza se desmorona.
Y mientras algunos luchan por mantener sus raíces, vemos cómo docentes abandonan el uso del catalán. Una situación preocupante que levanta pasiones: “Vine aquí, Izan… ‘Que vengas, te he dicho’!” gritan aquellos que intentan preservar nuestra cultura.
A medida que avanzamos por este laberinto social y político, hay quienes continúan haciendo negocios con lo que debería ser una emergencia residencial. Este panorama es cada vez más inquietante.
No olvidemos a Mario Vargas Llosa, un referente literario cuya obra sigue resonando en nuestros corazones. Y ante esta tempestad cultural y social, Impulsa Balears nos recuerda la necesidad urgente de un sistema turístico sostenible que realmente beneficie a todos nosotros.