Después de días de incertidumbre y sufrimiento, la eurodiputada francesa Rima Hassan y cinco valientes activistas han sido trasladados al aeropuerto de Ben Gurión, listos para regresar a sus países. Estos defensores de los derechos humanos, que estaban a bordo del buque ‘Madleen’, se dirigían a Gaza cuando fueron interceptados en aguas internacionales.
El crudo relato de su detención
La organización Adalah, encargada de su defensa legal, ha confirmado que tras más de 72 horas bajo custodia, las autoridades israelíes finalmente han decidido deportar a estos activistas. Entre ellos se encuentran también el brasileño Thiago Ávila, quienes enfrentaron condiciones duras e incluso aislamiento en distintas cárceles. Junto a ellos están Suayb Ordu (de Turquía), Yasemin Acar (Alemania), Reva Viard (Francia) y Mark van Rennes, quien será el último en dejar Israel.
No obstante, no todos corren la misma suerte: los franceses Pascal Maurieras y Yanis Mhamdi, siguen tras las rejas. Su defensa ha denunciado lo que consideran malos tratos durante su encarcelamiento. La situación es alarmante y se hace un llamado urgente: «Pedimos la liberación inmediata de todos los activistas para que puedan volver sanos y salvos a sus hogares», rezan las palabras del comunicado emitido por Adalah.
Aquí estamos frente a una violación evidente del Derecho Internacional por parte de Israel, un acto que no podemos pasar por alto. El mundo está observando.