La reciente actuación de Melody en Eurovisión ha dejado una estela de comentarios y reacciones. Su salida abrupta de Basilea, justo después de terminar el festival, sorprendió a muchos. De hecho, apenas tuvo tiempo para asimilar la experiencia antes de incumplir su agenda con RTVE. La artista quedó antepenúltima con su tema ‘Esa diva’, lo que desató rumores sobre discusiones en el camerino.
Un mensaje claro entre las dificultades
A pesar del revuelo, Melody ha decidido hablar. En una rueda de prensa tardía, donde se sintió más tranquila tras nueve días reflexionando, compartió sus sentimientos: “Los artistas muchas veces tenemos dificultades que nadie sabe”. Su voz resonó clara cuando expresó lo orgullosa que estaba de haber dado todo en el escenario.
Parece que la presión fue intensa. “Antes de terminar, comuniqué que necesitaba unos días de descanso. Estaba agotada”, confesó. Su deseo por pasar tiempo con su hijo y regresar a la normalidad chocó con las críticas sobre su actitud en Basilea: “Se han dicho cosas que no son verdad”, aclaró, refutando acusaciones de mal comportamiento. Con humildad, añadió: “Mi calidad humana no me lo permite”.
A pesar del resultado poco favorable —37 puntos en total— Melody ha reconocido el interés que despertó su participación. Aún así, lamenta que quizás un tema diferente podría haberle llevado más lejos: “Con otro tema hubiese barrido”. Se nota la frustración al recordar cómo le cambiaron la producción musical y la puesta en escena sin respetar lo votado en el Benidorm Fest.
No obstante, hay algo más profundo detrás de este fiasco artístico: Melody también vivió un momento político delicado durante el festival. Justo antes de su actuación, se mencionaron las víctimas del conflicto en Gaza y algunos vieron esto como un factor que pudo influir negativamente en sus votos. Ella misma comentó al respecto: “Quería dejarlo claro: los derechos de las personas están por encima de todo”.
Así es como esta joven artista navega entre las luces del escenario y los retos personales y sociales. Melody sigue deseando paz para todos nosotros: “Nos merecemos disfrutar de la vida”.