Hoy es un día importante para el fútbol joven, y Pablo Ortells, el director deportivo del RCD Mallorca, lo sabe. Con el Europeo sub-21 a punto de comenzar en Eslovaquia, su mirada está fija en los futuros talentos que podrían brillar en la élite. El torneo arranca con un emocionante partido entre España y el país anfitrión, y Ortells no quiere perderse ni un detalle.
Un ojo en los jóvenes y otro en la casa
A pesar de la emoción por el campeonato, la realidad del Mallorca no puede ignorarse. Mientras Ortells busca nuevas promesas que fortalezcan al equipo bermellón, también tiene que lidiar con la incertidumbre del mercado de fichajes. Hasta ahora, solo ha conseguido cerrar la renovación de Mateu Morey; todo lo demás sigue en el aire. El director no oculta su preocupación: «Hemos hecho un grupo muy fuerte con bases sólidas», asegura mientras su mente repasa las múltiples tareas pendientes.
La situación financiera del club añade una capa de presión a su misión: se necesita vender antes de poder comprar. Esta estancada dinámica afecta a muchos equipos y especialmente al Mallorca, que se siente apretado por las circunstancias. En este contexto, viajar al Europeo parece ser una jugada inteligente para rastrear talentos sin tanto ruido mediático.
A medida que avanza el torneo, Ortells tendrá que tomar decisiones cruciales sobre cómo mejorar la plantilla. Las oportunidades están ahí, pero hay que saber aprovecharlas antes de que se conviertan en ilusiones perdidas.