MADRID, 19 de junio. Hoy, una nueva sombra se cierne sobre Gaza. Al menos 16 palestinos han perdido la vida en un ataque devastador por parte de las tropas israelíes, justo cuando esperaban recibir asistencia humanitaria en el centro de la Franja. Este trágico suceso no es solo un número más; es una parte de la historia desgarradora que estamos presenciando en medio de una crisis humanitaria que parece no tener fin.
Según ha informado la agencia palestina WAFA, el ataque tuvo lugar en Uadi Gaza, cerca de Nuseirat, y ha dejado a casi un centenar de personas heridas. Por ahora, el Ejército israelí guarda silencio sobre lo ocurrido, pero nosotros sabemos que cada día que pasa trae consigo más dolor y sufrimiento.
Naciones Unidas exige acción inmediata
La comunidad internacional no puede quedarse mirando. Naciones Unidas ha hecho un llamado urgente para abrir investigaciones inmediatas e independientes sobre estos disparos mortales durante las entregas de ayuda. Solo el martes pasado, ya se denunciaba la muerte de casi 60 personas en incidentes similares. El eco del llanto resuena fuerte entre quienes luchan por sobrevivir.
A medida que se intensifican los ataques, las autoridades controladas por Hamás han declarado que desde el inicio de estas operaciones humanitarias respaldadas por Israel y Estados Unidos han muerto cerca de 400 palestinos, con más de 3.000 heridos. Esto incluye aquel infame suceso donde murieron personas cerca de un camión de la ONU.
Todavía resuenan las palabras del alcalde de Toledo tras escuchar declaraciones preocupantes: «Es hora de que los diputados del PSOE digan basta ya». La indignación está presente y muchos nos preguntamos hasta cuándo seguiremos siendo testigos mudos ante tanto horror. La ofensiva lanzada tras los ataques del 7 de octubre ha dejado cifras desoladoras: más de 55.600 muertos y alrededor de 130.000 heridos. ¿Hasta dónde llegará esta espiral? La cifra real podría ser aún más escalofriante.