La jornada en el Circuito de Motocenter «Zelta Zirgs» fue testigo de un Rubén Fernández que, tras recuperarse de su caída en Alemania, se plantó con ganas y determinación. Pero, a pesar de su esfuerzo y habilidades, se quedó a las puertas del podio en la última cita del Mundial de Motocross.
El gallego llegó con la moral alta después de recibir el alta médica justo a tiempo para participar en la clasificación del MXGP de Letonia. Era uno de los nombres que todos esperábamos ver brillar; sin embargo, el día comenzó marcado por el dominio absoluto de Jeffrey Herlings. El neerlandés no solo se hizo con el ‘holeshot’, sino que también dejó atrás a sus competidores desde el inicio.
Un regreso lleno de luchas y emociones
Aunque Rubén comenzó bien, ocupando rápidamente la tercera posición en los primeros giros, tuvo que enfrentarse a una dura batalla con Lucas Coenen y Romain Febvre. Este último es un piloto fuerte, actual líder del Mundial, que intentó recuperar terreno pero no logró desbancar a Herlings ni a Coenen. La carrera transcurrió sin demasiados adelantamientos, lo que hizo aún más difícil para Fernández escalar posiciones.
No obstante, hay que resaltar la valentía y determinación del piloto gallego al defender su plaza ante otros competidores como Coldenhoff. Aun así, su lucha se vio mermada por algunos errores puntuales en pista. La sensación es que este joven tiene mucho más por dar y está claro que cada vez está más cerca de conseguir ese merecido podio.
En otra categoría, Simon Längenfelder brilló en MX2 llevándose una victoria contundente sobre Benistant y Reisulis. Mientras tanto, otros pilotos como Oriol Oliver y Guillem Farres también dieron un buen espectáculo al terminar entre los diez mejores.
Sin duda alguna, el motocross sigue trayendo emociones intensas para nosotros los aficionados. ¡Esperemos ver pronto a Rubén Fernández dando lo mejor en las próximas carreras!