La tranquilidad de Valldemossa se ha visto sacudida por la inquietante noticia de la desaparición de uno de sus vecinos, Antonio Juan R.M., un hombre de 62 años que lleva casi dos días sin dar señales. La comunidad está en vilo, porque Antonio es conocido por su rutina y por ser alguien a quien nunca le ha pasado esto. ¿Cómo puede ser que una persona tan familiar para todos desaparezca así, sin dejar rastro?
Un coche encontrado, pero muchas preguntas
Su vehículo, un Toyota Yaris blanco, fue hallado cerca de la escuela de música del pueblo. Este detalle no hace más que aumentar las dudas; según el CNDES (Centro Nacional de Desaparecidos), el último lugar donde lo vieron fue Puigpunyent. La confusión crece y los corazones se aprietan al pensar en su familia y amigos.
A medida que las horas pasan y las búsquedas no dan frutos, la preocupación se apodera del ambiente. Las fuerzas de seguridad ya están en alerta y hay voluntarios dispuestos a ayudar; mañana jueves a primera hora se organizará un nuevo rastreo desde el Magatzem Municipal. La cita es a las 08:00, y se aconseja ir bien preparados para afrontar esta difícil tarea bajo la coordinación de los efectivos de Emergencia.
Hoy miércoles, los esfuerzos han sido intensos pero infructuosos. Al caer la noche, la búsqueda se detuvo momentáneamente; sin embargo, si no hay novedades pronto, incluso podrían incorporar un servicio aéreo para ayudar en esta misión desesperada.
El CNDES ha compartido una descripción clara: Antonio es un hombre delgado, con ojos marrones, canoso y parcialmente calvo; mide 1,75 metros y pesa alrededor de 75 kilos. Si tienes alguna información sobre su paradero o has visto algo extraño estos días, te instamos a contactar con la Guardia Civil al 062. Cada pequeño detalle cuenta en momentos como este.

