En una historia que deja un mal sabor de boca, un hombre ha sido condenado en Palma a dos años de cárcel por estafar casi 5.000 euros a una mujer, haciéndole creer que mantenían una relación sentimental a distancia. El acusado, un español de 39 años que residía en Alicante, conoció a la víctima a través de un chat en Internet y durante dos meses le pidió diversas cantidades de dinero.
Una trampa emocional bien tejida
Todo comenzó en abril de 2022. El hombre se ganó la confianza de la mujer con promesas de amor y futuro juntos, pero su verdadero objetivo estaba claro: obtener beneficios económicos a costa de ella. Según el fallo del juzgado, no solo manipuló sus sentimientos, sino que también la convenció de ayudarle para dejar su trabajo y hacerse autónomo.
A medida que avanzaba su juego, las excusas comenzaron a brotar como champiñones tras la lluvia. Le pidió dinero para arreglarse los dientes, para comprar comida e incluso más adelante por motivos como pagar multas o desbloquear cuentas corrientes. En total, el daño asciende a 4.870 euros. La jueza no solo impuso prisión al estafador; además, le ordenó indemnizar a la víctima con esa misma cantidad y otros 1.000 euros por el sufrimiento causado.
No podemos evitar pensar en lo fácil que es caer en estas trampas cuando el corazón está involucrado. Este caso nos recuerda lo importante que es estar alerta y no dejarse llevar por ilusiones vacías.

