En una tranquila madrugada en Can Pastilla, la calma se vio interrumpida por un acto que nos deja a todos con el corazón encogido. La Policía Nacional ha arrestado a un hombre argelino de 33 años tras una presunta agresión sexual a una joven que se alojaba en el mismo hostal. Una situación que podría haberse evitado, pero que, lamentablemente, ocurrió.
Un momento aterrador
Todo sucedió en un instante. La víctima, al parecer, se encontró con su agresor cuando este irrumpió en el aseo de mujeres del establecimiento. Consciente de lo que estaba haciendo, la abrazó sin su consentimiento y la tocó de manera inapropiada. Al enterarse de lo ocurrido, la policía llegó rápidamente al lugar y no dudaron ni un segundo: detuvieron al hombre, quien intentó justificarse diciendo que solo quería «darle una toalla». Pero eso no cambia lo sucedido.
A raíz de este terrible episodio, se activó el protocolo correspondiente y la joven fue trasladada al Hospital de Son Espases para recibir atención médica y documentar sus lesiones. Los agentes realizaron su trabajo diligentemente y llevaron al sospechoso a dependencias policiales para esclarecer los hechos.
A pesar de la gravedad del asunto, el juez decidió dejarlo en libertad asistido por su abogado Nicolás Sosa. Pero aquí es donde las cosas se complican aún más; según los informes, durante todo este proceso, la víctima mostró actitudes confusas hacia los agentes e incluso se negó a firmar su declaración. Un final incierto para un episodio ya demasiado doloroso.
No podemos quedarnos callados ante situaciones así; tenemos que hablar sobre ello y crear conciencia. Todos merecemos sentirnos seguros en cualquier lugar.