Esta tarde, justo alrededor de las 14.00 horas, el aire tranquilo de la calle de l’Ordi en Son Ferriol se vio interrumpido por el espectáculo devastador de un camión que ardía sin previo aviso. ¿Cómo es posible que un vehículo estacionado se prenda fuego así, de la nada? Afortunadamente, el conductor no estaba dentro y eso evitó que tuviéramos que lamentar heridos.
La rápida respuesta de los servicios de emergencia
Los Bomberos de Palma llegaron al lugar rápidamente, armados con sus mangueras para combatir las llamas que devoraban el camión, propiedad de Coca Cola. La Policía Local también hizo su aparición para regular el tráfico y asegurar que la situación no se complicara más. Mientras tanto, las llamas hacían su trabajo: los suministros de bebidas carbonatadas dentro del vehículo no tardaron en convertirse en humo y cenizas.
Aunque el incendio parecía descontrolado, hubo una pizca de suerte: las llamas no lograron extenderse a otros vehículos ni a la vegetación cercana. Todo ocurrió cerca de una zona llena de árboles y matorrales, lo que podría haber sido una tragedia mayor. Pero hoy, gracias a la rápida intervención del equipo de emergencia, solo nos queda hablar sobre este extraño incidente.