La historia de Michelle Noschese, conocido en el mundo de la música como DJ Godzi, ha tomado un giro desgarrador. El pasado sábado, los vecinos de Santa Eulària se vieron alarmados por ruidos y gritos que venían de un hogar cercano. La situación era insostenible; varios llamaron a la Guardia Civil ante lo que parecía un verdadero caos.
Cuando los agentes llegaron al lugar, se encontraron con una escena impactante. Michelle, bajo los efectos de las drogas, había saltado al balcón de su vecino amenazando a este con un cuchillo. En medio del descontrol, también había agredido a una mujer que, asustada y llena de moretones, tuvo que huir por miedo a que él le hiciera más daño.
Un desenlace trágico
A medida que la tensión aumentaba, las autoridades se vieron obligadas a intervenir para detenerlo. Pero la resistencia del DJ fue feroz. Perdió el conocimiento durante el proceso y aunque los agentes intentaron reanimarlo durante varios minutos, cuando llegaron los servicios sanitarios ya era demasiado tarde; habían perdido a Michelle.
La autopsia reveló lo que muchos temían: todo apunta a que su muerte fue consecuencia de la ingesta continuada de sustancias estupefacientes. Se encontraron restos de 2CB, ketamina y cocaína en su hogar, dejando claro el oscuro panorama en el que se movía este artista.
A pesar del doloroso desenlace, las investigaciones han seguido su curso para esclarecer todos los hechos. La Guardia Civil ha estado recogiendo testimonios y analizando cada detalle para asegurar una investigación transparente y rigurosa sobre cómo llegó a ocurrir esta tragedia. Es difícil no sentir compasión por una vida tan prometedora truncada por decisiones fatídicas.