El 27 de mayo, la Policía Nacional dio un paso decisivo al detener a un hombre de 33 años, originario de República Dominicana, tras haber cometido una agresión brutal en pleno corazón de Santa Catalina. Este incidente, que tuvo lugar el pasado 17 de mayo durante la madrugada, dejó a un hombre gravemente herido con cortes profundos en el cuello y la cara. Todo comenzó cuando se desató una pelea en un local nocturno; la situación rápidamente se tornó caótica.
Los agentes llegaron al lugar tras recibir alertas sobre una multitud aglomerada y, entre los gritos y el jaleo, encontraron a la víctima desplomada en la acera. La escena era desgarradora: sangre por todas partes mientras dos policías fuera de servicio prestaban los primeros auxilios taponando las heridas hasta que llegaron los servicios sanitarios para realizar suturas y trasladarlo al hospital.
Testigos narran el horror vivido
A medida que los investigadores interrogaron a quienes estaban allí esa noche, las piezas del rompecabezas comenzaron a encajar. Testigos relataron que todo había empezado entre dos hombres dentro del establecimiento; uno fue atacado con un vaso de cristal por el presunto agresor. Afortunadamente, un amigo logró sacar a la víctima del bar para evitar más golpes. Sin embargo, esto no terminó ahí: otros amigos intentaron ayudar y también fueron blanco de ataques.
Uno de ellos recibió cortes en los brazos tras ser alcanzado por una botella lanzada por un desconocido que decidió añadir más caos a una situación ya crítica. Otro amigo sufrió heridas similares mientras intentaba mediar. La violencia estalló como si fuera una chispa en pólvora; lo que debería haber sido una noche normal se convirtió en un episodio aterrador.
A raíz de este evento tan perturbador, el grupo de investigación de la Comisaría de Distrito Oeste no perdió tiempo y se puso manos a la obra para identificar al responsable. Tras unos días intensos de indagaciones, lograron dar con él y detenerlo finalmente.