Era una tarde tranquila en la plaza San Cosme, en el barrio de Son Cotoner, cuando de repente el silencio se rompió con el estruendo de las sirenas. Poco antes de las 15:00 horas, un incendio estalló en la cocina de un bar, y lo que parecía ser un día cualquiera se convirtió en una escena caótica. La situación obligó a evacuar no solo el local, sino también a varios vecinos de los edificios cercanos.
La chispa que encendió la alarma
El fuego tuvo su origen en una freidora que sufrió una fuga de gas desde una bombona de butano. En un abrir y cerrar de ojos, las llamas se extendieron rápidamente por el establecimiento, desatando el pánico entre quienes estaban allí. Entre los clientes y trabajadores del bar había quien no pudo escapar ileso; uno resultó herido y tuvo que ser trasladado urgentemente en ambulancia a una clínica privada.
Afortunadamente, los servicios de emergencia respondieron sin dilación. Varias patrullas de la Policía Nacional y Local llegaron al lugar junto con dotaciones del cuerpo de Bomberos de Palma para controlar la situación. Mientras tanto, los sanitarios atendieron a dos personas afectadas; una recibió el alta inmediatamente y la otra fue llevada al hospital con lesiones menos graves.
Este incidente nos recuerda lo vulnerable que puede ser nuestra rutina diaria ante lo inesperado. Esperamos que todos los afectados se recuperen pronto y que esta experiencia sirva como recordatorio para tomar siempre precauciones.