Este miércoles, alrededor de las 12.30 del mediodía, se vivió un momento de tensión en el Dique del Oeste. Un escalador, que no sabía nadar, se precipitó desde las rocas al mar. La alarma sonó rápidamente y los socorristas de la playa de Cala Major no perdieron ni un segundo para actuar.
El equipo de emergencias, con su embarcación lista para navegar a toda velocidad, llegó a la escena justo a tiempo. Al desembarcar, descubrieron que uno de los escaladores había logrado salir del agua por su cuenta, pero el otro enfrentaba una situación desesperada.
La valentía del equipo de rescate
Con la adrenalina a mil por hora y el sentido del deber en juego, los socorristas no dudaron en lanzarse al agua. Su intervención fue crucial; lograron sacar al escalador y llevarlo a tierra firme. Afortunadamente, el joven estaba en buen estado de salud después de haber pasado por un verdadero susto.
No podemos dejar pasar esta oportunidad para recordarles a todos: extremen las precauciones, sobre todo en zonas donde no hay vigilancia y donde las rocas pueden convertirse en trampas peligrosas. Es mejor prevenir que lamentar.