Imagina la escena: un tranquilo día en s’Arenal de Llucmajor, donde la vida sigue su curso habitual, cuando la Guardia Civil da el alto a un vehículo que no parece llevar lo que debería. Así comenzó todo el 21 de mayo, cuando un hombre de 66 años fue sorprendido con cuatro enormes cajas llenas de camisetas falsificadas del Inter de Miami, el equipo donde juega Leo Messi.
Un hallazgo curioso y preocupante
Los agentes estaban realizando un control rutinario cuando decidieron inspeccionar este coche. Al abrir una de las cajas, se encontraron con una cantidad impresionante de camisetas del club estadounidense adornadas con el logotipo de Adidas. Pero aquí viene lo más llamativo: el conductor no tenía ningún documento que respaldara la compra legítima de estos productos. ¿Qué pensaba hacer con tanto material? La verdad es que resulta inquietante pensar en cómo a veces se juega con la propiedad industrial sin pensar en las consecuencias.
Aparte del riesgo para su propia seguridad, ya que esas cajas tapaban casi toda la visión trasera, esta situación es una muestra más del problema del monocultivo turístico, donde muchos intentan aprovecharse sin escrúpulos. Finalmente, los agentes procedieron a precintar las cajas y levantaron un acta para documentar esta aprehensión.
Parece increíble que en pleno siglo XXI sigamos viendo estas situaciones, pero aquí estamos, recordándonos a nosotros mismos lo importante que es proteger nuestras marcas y nuestro comercio justo.