La tarde del lunes, antes de que el reloj marcara las tres, un incendio inesperado comenzó a devorar unos palés en una nave que está en plena construcción en Santanyí. La humareda negra que se alzaba hacia el cielo no tardó en atraer la atención de conductores y trabajadores, quienes, alarmados por la situación, comenzaron a llamar a los servicios de emergencia.
Las llamadas no cesaron; todos querían entender qué estaba ocurriendo con esa inmensa nube oscura que parecía cubrirlo todo. Algunos trabajadores de la zona tuvieron que ser desalojados como medida de precaución. En cuestión de minutos, las sirenas rompieron el silencio y los equipos de emergencias se hicieron presentes. Los bomberos de Mallorca y ambulancias llegaron rápidamente para poner fin al fuego.
Intervención urgente
No solo los bomberos estaban involucrados; la Guardia Civil también se personó para iniciar una investigación sobre lo sucedido. ¿Qué había llevado a este incendio? ¿Por qué esos palés terminaron ardiendo? Estas preguntas flotaban en el aire mientras todos observaban preocupados desde lejos. Por ahora, lo único claro es que la comunidad se unió nuevamente ante una situación incierta, reflejando esa solidaridad que siempre nos caracteriza.