Una noche cualquiera en el Paseo Mallorca se tornó oscura y peligrosa. Un indigente, conocido por los vecinos que frecuentan esa zona, se encontraba tranquilamente apostado en su banco habitual cuando de repente la calma se rompió. Según relatos de quienes estaban allí, la escena se tornó escalofriante. Todo comenzó con una discusión sobre un perro que había sacado a pasear una mujer, que no tardó en desatar su ira.
Un ataque inaceptable
Los gritos resonaban: «¡Negro de mierda, eres una basura!», le espetó ella al hombre mientras escupía su desprecio directamente a su cara. Este tipo de comportamiento es inaceptable, y lo más preocupante es que no paró ahí. Una vecina que intentó defender al indigente fue también blanco de insultos, recibiendo amenazas como «a ti se te va a caer el pelo, asquerosa». La agresividad era palpable.
Después del altercado inicial y con la intervención de algunos testigos, la mujer regresó al lugar donde estaba el indigente ya pasadas las nueve de la noche. Con un cuchillo en mano y furia desatada, lanzó una amenaza aterradora: «Te lo dije, negro de mierda. Te voy a matar por la noche». En un acto heroico o quizás instintivo, el hombre logró esquivar el ataque e incluso calmarla momentáneamente ante los gritos desesperados de los testigos.
La verdad es que este señor lleva meses viviendo en ese banco del Paseo Mallorca sin causar problemas a nadie. Rodeado de palomas y con una vida dura tras él, ha sabido adaptarse a su situación precaria. Pero esta vez se encontró con alguien cuyo rencor parecía no tener límites. Es triste ver cómo hay quienes tiran por la borda cualquier atisbo de humanidad ante los más vulnerables.