La Policía Nacional ha dado un golpe en la mesa al detener en Molina de Segura, Murcia, a un hombre de 32 años acusado de agresión sexual a una menor de tan solo 12 años. Este lamentable episodio ha dejado a la comunidad con el corazón encogido y ha desatado una oleada de indignación en las redes sociales. Muchos no dudan en calificar lo ocurrido como una violación y claman justicia.
Una realidad que duele
Según cuentan fuentes cercanas a la investigación, el detenido había mantenido contacto con la niña en varias ocasiones y había quedado con ella al menos dos veces. Pero aquí no termina la cosa; la edad de consentimiento sexual en España es crucial para entender el trasfondo legal de este suceso. Desde 2015, esa edad se sitúa en los 16 años, alineándose así con las normativas europeas y las recomendaciones del Comité de los Derechos del Niño. Antes de esta reforma, España tenía una de las edades más bajas del continente: apenas 13 años.
El artículo 183 bis del Código Penal establece que para que alguien pueda ser eximido de responsabilidad penal por relaciones sexuales con menores debe haber ciertas condiciones. El autor tiene que ser cercano tanto en edad como desarrollo a la víctima, además no pueden darse situaciones como violencia o abuso. Es fundamental recordar que cualquier relación sexual con un menor por debajo de los 16 años se considera delito, sin importar si hubo consentimiento o no.
Este tipo de casos nos obligan a reflexionar sobre nuestra sociedad y cómo protegemos a nuestros niños. La fijación de esta edad busca salvaguardar su bienestar y desarrollo psicológico ante posibles abusos. Necesitamos estar alerta y unidos para evitar que historias como esta se repitan.