En la mañana de este lunes, el barrio de Son Gotleu fue escenario de una situación angustiante que dejó a todos con la respiración contenida. Un presunto maltratador, tras agredir a su pareja, se lanzó a la fuga en su vehículo, dejando atrás no solo el dolor de su víctima, sino también un agente herido.
Todo comenzó en la plaza de Miquel Dolç. La Policía Nacional se movilizó rápidamente al recibir el aviso de la agresión. Mientras unos agentes atendían a la mujer agredida, otros salieron tras el rastro del delincuente. Fue entonces cuando lo localizaron huyendo en su coche.
Un momento decisivo
Uno de los policías decidió ponerse detrás del vehículo para darle el alto, pero el conductor hizo caso omiso y embistió al agente, que afortunadamente sufrió lesiones leves. Sin embargo, otro compañero no dudó en posicionarse frente al coche para evitar su escape. En un acto desesperado y valiente, tuvo que esquivar el vehículo y disparar dos veces a una de las ruedas.
Pese a esta intervención, el hombre continuó su camino como si nada hubiera pasado. A esa hora crítica, múltiples unidades policiales, incluyendo Homicidios y Seguridad Ciudadana, se lanzaron a la búsqueda del fugitivo que había dejado un rastro de miedo y caos.
El hecho es un recordatorio más de las peligrosas realidades que enfrentan tanto las víctimas como los agentes encargados de protegerlas. En este tipo de situaciones es crucial actuar con rapidez y valentía.