En una conmovedora y preocupante historia que ha sacudido a nuestra comunidad, la Policía Nacional ha detenido en Palma a un ojeador de fútbol por presuntamente haber agredido sexualmente a un menor. Todo comenzó cuando la madre del niño decidió dar un paso al frente y presentar una denuncia que dejaría al descubierto una situación alarmante.
Este individuo, un español que se dedicaba a captar talentos en el mundo del fútbol, conoció al menor mientras este jugaba en un campo. Con palabras seductoras y promesas de asesoramiento, convenció a los padres para que dejaran que su hijo fuera a su casa bajo el pretexto de tomar medidas para ayudarle en su carrera deportiva. Lo que parecía ser una oportunidad brillante se convirtió rápidamente en una pesadilla.
Un acto despreciable
Una vez dentro del coche, ya comenzó con tocamientos inapropiados; le tocó el muslo antes incluso de llegar a su hogar. Pero eso no fue todo, porque lo peor estaba por llegar. En su casa, mientras supuestamente le medía para sus “consejos”, el hombre manoseó las partes íntimas del niño. Un acto despreciable que hizo que el pequeño se apartara inmediatamente, consciente de que algo no estaba bien.
Afortunadamente, al regresar a casa, el niño tuvo el valor de contarle todo a sus padres. La madre, indignada y preocupada por lo ocurrido, no dudó ni un segundo en acudir a la policía y presentar la denuncia correspondiente. Así comenzaron las investigaciones llevadas a cabo por la Unidad Familia y Mujer (UFAM), culminando con la detención del sospechoso por agresión sexual contra menor.
No podemos quedarnos callados ante estas situaciones tan graves; es esencial apoyar siempre a quienes sufren abusos y denunciar cualquier irregularidad. Este caso nos recuerda la importancia de estar alertas como comunidad y proteger lo más valioso: nuestros niños.