Tolo Del Amor, un nombre que resuena en las calles y en los rincones más oscuros de Mallorca, ha decidido abrir su alma con su nuevo libro El Minotauro nunca duerme. A su lado, el periodista Xisco Fuster, quien ha recorrido un largo camino en el mundo de la información, ha sido su compañero en esta aventura literaria. Juntos han plasmado una serie de casos reales que nos llevan al corazón del misterio.
Una novela negra nacida del asfalto
¿Y cómo se gestó esta idea? La chispa fue obra de Xisco, quien soñaba con dar vida a una novela negra. Fue entonces cuando Tolo comenzó a desvelar aquellos crímenes que dejaron huella en la isla y donde él estuvo al mando. Ahora imagina abrir las páginas del libro: encontrarás no solo relatos inquietantes, sino también entrevistas que te harán sentir parte de esta travesía. Lo más atractivo es que abordan otros temas paralelos que prometen engancharte desde la primera línea.
Uno de los detalles más impactantes es la participación de un exintegrante de la famosa banda Kraken. ¿Cómo lograron esa entrevista? Tolo admite que le daba miedo preguntarle directamente; recordemos que él detuvo a este personaje años atrás. Pero fue Xisco quien tomó las riendas, localizó al hombre y lo convenció para compartir su historia con ellos.
A lo largo de sus 44 años en la Guardia Civil —una vida entera dedicada a servir—, Tolo ha vivido situaciones inimaginables. Desde el País Vasco hasta los escenarios más complicados, cada experiencia le ha dejado una marca imborrable. Entre todos esos casos difíciles, uno sobresale por encima del resto: el asesinato de Bryan. Un caso desgarrador que aún le provoca escalofríos al recordar las escenas tan duras que tuvo que afrontar.