Imagina esto: un tipo decide que prefiere enfrentarse a la policía antes que acompañar a su mujer de compras. Suena surrealista, pero en Krasnoyarsk, Rusia, ha ocurrido algo así. Este hombre, en un acto de desesperación o pura genialidad, simuló el robo de su propio coche.
Una historia insólita
El incidente tuvo lugar en abril, aunque la noticia no salió a la luz hasta octubre cuando una mujer llamó al 112 para reportar que le habían robado el Toyota Corolla de su marido. Sin embargo, lo curioso llegó después: al poco tiempo, volvió a comunicarse para informar que habían encontrado el vehículo en una isla cercana.
Los agentes llegaron y comenzaron a investigar. Al inspeccionar el coche, notaron signos evidentes de que algo raro estaba pasando: puerta forzada y el interruptor del encendido destrozado. Cuando interrogaron al marido, su historia comenzó a desmoronarse como un castillo de naipes.
A medida que los policías profundizaban en las preguntas, cada respuesta parecía más absurda y confusa. Al final, tras revisar todas las pruebas disponibles, los agentes concluyeron que todo había sido un plan ingenioso (o quizás muy torpe) para evitar salir de compras con su esposa.
Las consecuencias no se hicieron esperar
A pesar de ser un ciudadano sin antecedentes penales, este hombre ahora se enfrenta a serias repercusiones legales. La policía ha abierto una causa penal por denuncia falsa, y podría acabar tras las rejas durante dos años si es hallado culpable.
Una situación inesperada que deja mucho que pensar sobre cómo algunos intentan evadir responsabilidades cotidianas… ¡Pero desde luego nunca imaginamos que esto pudiera llevarles tan lejos!

