Trabajar en la hostelería, especialmente en pleno verano, es un auténtico reto. La mayoría de nosotros lo sabe bien: el ritmo se acelera y las horas parecen no tener fin. Pero lo que nunca pensamos es que una simple enfermedad podría llevarnos a perder nuestro empleo. Eso le ocurrió a una joven camarera que, tras pedir una baja médica por necesidad, se encontró con el despido como respuesta.
La historia comenzó cuando esta trabajadora decidió compartir su experiencia en X, donde se ha hecho conocida por destapar las condiciones laborales del sector. En un mensaje dirigido a su jefe, explicó con claridad su situación: «Me he despertado con un bulto en la rabadilla y estoy rabiando de dolor. Están viniendo para llevarme al médico». Todo parecía ir sobre ruedas hasta que el doctor le informó que necesitaba operarse y le otorgó 15 días de baja.
Un giro inesperado
Sin embargo, apenas media hora después de comunicarle la baja, recibió un mensaje frío de la Seguridad Social informándole de que su contrato había sido rescindido. Ella no podía creerlo: «¿Me despides así? ¿Por ponerme enferma?» cuestionaba atónita. Lo más frustrante fue recibir únicamente una notificación para recoger sus cosas sin ninguna explicación.
A esto se sumaron los insultos a través de redes sociales por parte de la hija del propietario del local: «Eres tan fea de lo mala que eres… más te tendría que pasar», fueron algunas de las palabras lanzadas al aire como si nada importara. Es desolador ver cómo hay empresas que no solo ignoran el bienestar de sus empleados, sino que además atacan cuando estos atraviesan momentos difíciles.
El caso ha resonado entre los usuarios de X, acumulando casi un millón de reproducciones y generando una ola de indignación generalizada. Muchos piden saber el nombre del restaurante para denunciarlo públicamente: «No quiero pisar jamás un negocio así» o «qué bonita multa va a pagar ese empresario», son solo algunos ejemplos del clamor popular.
Esta historia nos recuerda lo importante que es cuidar nuestra salud y defender nuestros derechos laborales en un entorno donde aún queda mucho por cambiar.