En un rincón del mundo digital, un niño se convirtió en una sensación sin siquiera ser consciente de ello. Rayyan Arkan Dikha, un chaval de 11 años, ha dado vida a un nuevo término que ha captado la atención de muchos: el ‘aura farming’. Pero, ¿qué significa realmente? Pues bien, este concepto nace de las acciones que hacen que alguien brille por su carisma. Y lo más sorprendente es que Rayyan no buscaba parecer superior a nadie.
Un baile tradicional con repercusiones inesperadas
Todo empezó durante un viaje con amigos, vestido con su traje tradicional Teluk Belanga y un pañuelo malayo. Mientras se balanceaba entre las olas del mar, realizó una coreografía natural que encierra toda la esencia de la tradición de su país. Este ‘baile’ tuvo lugar en una competición de canoas en su pueblo natal, en la regencia de Kuantan Singingi, situada en el centro de Sumatra. Según cuentan las costumbres locales, los más pequeños deben colocarse al frente del barco para mostrar sus movimientos originales sin caerse.
Pero no nos engañemos; esto no es pan comido. Mientras nuestro pequeño héroe ejecuta sus movimientos con una calma admirable y casi mágica, sus compañeros tienen que esforzarse al máximo para remar y mantener velocidad. La habilidad para hacer ver algo tan complicado como sencillo le da ese aura especial que ahora todos admiramos.
El término ‘farming’, muy usado en el mundo gamer para describir acciones repetitivas que parecen simples pero requieren esfuerzo real, se une a ‘aura’ y así surge esta nueva moda que ha atrapado a gente de todas partes: desde gamers hasta deportistas y personas comunes como tú y yo. En medio del bullicio cotidiano y reflexionando sobre nuestras propias vidas, uno podría llegar a pensar: “¡Qué asco damos las personas!” como dijo alguien en un bufé libre en Ibiza. Así es la vida; siempre hay espacio para reflexionar mientras seguimos adelante.