Imagina que entras a un banco y, en lugar de formularios y cifras, te ofrecen un adorable muñeco Labubu solo por abrir una cuenta. Suena atractivo, ¿verdad? Sin embargo, las autoridades chinas han decidido que esta táctica no es el camino a seguir. El Banco Ping An, ubicado en Shenzhen, pensó que premiar a sus nuevos clientes con estos peluches si hacían un depósito de al menos 6.000 euros durante tres meses era una buena idea. Pero la Administración Nacional de Regulación Financiera ha puesto freno a esta promoción.
Preocupaciones financieras detrás de una oferta encantadora
Los reguladores han expresado su inquietud ante la posibilidad de que iniciativas como estas generen un aluvión de clientes que podría disparar los costes financieros del banco. Y no es para menos; esos simpáticos monstruitos diseñados por el artista Kasing Lung se han convertido en auténticas piezas de colección, especialmente después de haber sido lucidos por estrellas como Lisa de Blackpink o Rihanna. Al final del día, lo que comenzó como una estrategia aparentemente inofensiva para atraer nuevos clientes ha terminado siendo considerado un riesgo financiero significativo.