En el bullicioso mundo de TikTok, donde la creatividad y las opiniones chocan a cada momento, la usuaria @tokakeki ha decidido dar un paso al frente. Ante comentarios que reducen el gallego a «un dialecto» derivado del español y del portugués, ella no ha dudado en responder con una lección de historia y lingüística que nos recuerda que la lengua es mucho más que palabras.
“Comentarios como este hay muchísimos”, dice con firmeza en su vídeo. “Vamos a dar una pequeña clase porque no podemos dejar pasar estas afirmaciones tan erróneas”. Y así comienza su relato, llevándonos hasta tiempos en los que se gestaban las lenguas tal como las conocemos hoy. “El gallego y el castellano vienen del latín vulgar; aquí, en nuestra Península Ibérica, tenemos un crisol lingüístico después de la romanización”, explica. Pero claro, todo esto tiene matices.
Defendiendo la riqueza del gallego
A medida que avanza su discurso, @tokakeki aclara cómo ambos idiomas han tomado caminos diferentes: “Con el tiempo, el galaicoportugués evolucionó hacia lo que hoy conocemos como portugués y gallego. Por otro lado, el castellano siguió su propia senda”. ¿Y qué significa esto? Que el gallego tiene una evolución única e independiente del castellano.
Con pasión y claridad, argumenta: “Para considerar una lengua como tal necesita tener gramática propia, léxico propio y fonética propia”. Y ahí es donde saca a relucir otra verdad: “¡Qué casualidad! El gallego cumple con todos esos requisitos”. Además, subraya que tanto en nuestro Estatuto de Autonomía como en la Constitución española está reconocido como lengua oficial; no simplemente un dialecto.
Su vídeo ha resonado entre muchos, acumulando casi 142.000 visualizaciones. Los comentarios van desde elogios hasta reflexiones profundas sobre la identidad lingüística. Un usuario incluso comparte su experiencia: “Soy filólogo y profesor de lengua. Es increíble ver cuánta confusión persiste sobre la diferencia entre lengua y dialecto después de tantos años”. La defensa apasionada del gallego está lejos de ser solo un debate; es un grito por el reconocimiento de nuestra diversidad cultural.