¿Alguna vez te has parado a pensar en lo que puede hacer un simple gesto como apagar y encender tu móvil? Puede parecer una tontería, pero según la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos (NSA), es una práctica recomendada para todos. De hecho, hace un tiempo ya hablábamos de cómo este hábito ayuda a mantener el rendimiento de nuestros dispositivos. Pero ahora, además, nos sugieren que lo hagamos al menos una vez por semana para protegernos de ciertos ciberataques.
El peligro acecha incluso sin que lo sepamos
La razón detrás de esta recomendación es bastante seria. Existen ataques cibernéticos muy sofisticados, conocidos como zero-click, que pueden ejecutarse sin necesidad de que nosotros hagamos nada. No hace falta abrir un mensaje ni pulsar en un enlace; solo con tener el móvil encendido y conectado a internet es suficiente. Estos intrusos se cuelan en nuestros dispositivos y actúan en silencio, usando vulnerabilidades del sistema para instalarse y operar sin levantar sospechas.
Al reiniciar el teléfono, interrumpimos muchos de estos procesos maliciosos y obligamos a los atacantes a comenzar de nuevo su juego sucio. Así que, aunque pueda parecer insignificante, reiniciar el móvil se convierte en una acción clave dentro de un conjunto más amplio de buenas prácticas para cuidar nuestra seguridad digital.
No olvidemos otras recomendaciones esenciales: mantener siempre actualizado el software del dispositivo, usar contraseñas robustas e incluso activar la autenticación en dos pasos. Desactivar el Wi-Fi y Bluetooth cuando no estén en uso también ayuda mucho a evitar accesos no deseados.
A medida que crece nuestra preocupación por la vigilancia digital —tanto del gobierno como del sector privado— esta sencilla acción semanal se transforma en un ‘apagado preventivo’. Nuestros teléfonos son hoy mucho más que simples herramientas; son una extensión vital de nuestra vida personal y profesional.
Si bien algunos expertos sugieren reiniciar el móvil cada día para minimizar riesgos aún más —el primer ministro australiano ha llegado a recomendar cinco minutos diarios— es cierto que cuanto más frecuente sea esta práctica, menos oportunidades tendrán los atacantes para establecer conexiones indeseadas o ejecutar aplicaciones espías.
Así que ya sabes:, apaga tu dispositivo al menos una vez a la semana; esa pequeña acción puede marcar la diferencia entre estar protegido o ser víctima del cibercrimen.