Barbie, esa muñeca que ha acompañado a tantas generaciones, vuelve a hacer historia. Conocida por ser un icono de Mattel, no solo ha enfrentado críticas por los estereotipos que representa, sino que también ha buscado reinventarse y romper moldes. Detrás de su sonrisa hay una empresa gigante que no se detiene: Mattel. Ahora, la compañía no solo quiere seguir siendo parte del juego tradicional, sino dar un gran salto hacia lo desconocido: los juguetes impulsados por inteligencia artificial.
Un acuerdo revolucionario
La noticia es emocionante. Mattel se ha aliado con OpenAI, la mente maestra detrás de ChatGPT, para crear una nueva gama de juguetes y experiencias interactivas alimentadas por IA generativa. Aunque todavía no han revelado si el primer lanzamiento será una muñeca o una aplicación, lo cierto es que lo tendremos antes de que termine 2025. Un equipo pequeño está trabajando en estos conceptos desde la sede de El Segundo, California, y están decididos a hacerlo bien: quieren garantizar seguridad y privacidad para nuestros pequeños.
A medida que las normativas como COPPA en Estados Unidos o RGPD en Europa marcan límites claros sobre cómo tratar los datos de los niños, Mattel promete aplicar esta tecnología de manera ética y responsable. Pero eso no es todo; el acuerdo también permitirá a los empleados utilizar ChatGPT Enterprise para mejorar sus procesos internos y fomentar la creatividad dentro de la empresa.
No obstante, no todo son buenas noticias para Mattel en el ámbito financiero. La compañía enfrenta retos económicos significativos y ha tenido que ajustar sus expectativas anuales e incluso aumentar precios en Estados Unidos debido al incremento de costes logísticos. En un entorno donde las familias son más cautas al gastar, este movimiento hacia la inteligencia artificial podría ser justo lo que necesitan para revitalizar marcas clásicas como Barbie o Uno.
Pensar en una Barbie capaz de interactuar con los niños de manera personalizada suena increíblemente atractivo. Imaginemos a nuestros peques jugando con una muñeca que puede responder preguntas o narrar historias adaptadas a ellos. Sin embargo, queda claro que OpenAI mantendrá sus manos fuera del universo de marcas icónicas de Mattel; la empresa juguetera seguirá siendo dueña total de su legado.