En un giro sorprendente del deporte, China ha hecho historia al celebrar su primera media maratón con la participación de robots humanoides. En el bullicioso ambiente de Yizhuang, Pekín, 21 robots se unieron a miles de corredores humanos para enfrentar un recorrido de 21 kilómetros. Sin embargo, como muchos esperaban, no todo salió según lo planeado.
A lo largo del evento, algunos androides tuvieron problemas desde el primer momento. Según Bloomberg, las anécdotas no se hicieron esperar: “Uno se cayó en la línea de salida”, otro perdió la cabeza (literalmente) y rodó por el suelo, y otro más terminó hecho añicos tras un desplome inesperado. Pero entre tanto caos, el robot Tiangong Ultra logró completar la carrera en dos horas y 40 minutos, aunque no sin ayuda humana. Resulta que este valiente robot imitaba los movimientos de un corredor que iba delante con una especie de señalizador. Además, tuvo su propio momento dramático al caerse una vez y requerir tres cambios de batería durante el trayecto.
Tropiezos mecánicos y momentos hilarantes
No todos los androides tuvieron la misma suerte; algunos quedaron fuera de combate rápidamente. Un robot tuvo que esperar tendido en el suelo varios minutos antes de levantarse y continuar corriendo. Otro chocó contra una barandilla después de unos pocos metros, provocando que su operador humano también cayera al suelo. Es difícil no reírse ante tal espectáculo; ver a estos robots luchando por terminar es casi cómico.
A pesar del desbarajuste general, había ciertas reglas que los robots debían seguir para participar: tenían que parecer humanos y correr sobre dos piernas como nosotros. Además, estaban en un carril separado para evitar colisiones con los corredores humanos e incluso sus horarios estaban escalonados para minimizar riesgos.
Las empresas robóticas tenían opciones limitadas; podían reemplazar a sus robots fallidos pero eso implicaba penalizaciones temporales en la carrera. Al final del día, sólo cuatro lograron cruzar la meta dentro del límite establecido.
Esta peculiar carrera nos deja pensando sobre el futuro del deporte y la tecnología: ¿será esta solo una anécdota divertida o estamos viendo los primeros pasos hacia una era donde los robots compitan codo a codo con nosotros? Sin duda alguna, ¡el tiempo lo dirá!