Mario Bordonaba, desde 20Bits, nos trae la experiencia de haber tenido entre manos el nuevo vivo V50 5G, un sucesor que ha llegado para reafirmar lo que ya funcionaba bien en su antecesor, el V40 5G. Este modelo no solo mejora algunos aspectos sino que mantiene todo lo bueno, ¡y eso siempre es una buena noticia!
Un diseño que conquista
Desde el primer momento, al tenerlo en la mano, notas ese acabado en vidrio que le da un aire más premium y elegante. Con un color morado claro realmente bonito, el V50 se siente más ligero y delgado que su predecesor, aunque sigue siendo un teléfono grande. La pantalla AMOLED de 6.77 pulgadas brilla con fuerza; los colores son vibrantes y no importa si es de día o de noche, ¡siempre se ve genial!
A nivel de rendimiento, este dispositivo se siente ágil gracias a su procesador Snapdragon 7 Gen 3 y sus hasta 12 GB de RAM. Aunque no es el mejor para juegos muy exigentes, para las tareas del día a día va como un reloj. La fluidez es notable y apenas hay tirones.
Cámara: calidad por encima de todo
La fotografía sigue siendo uno de los puntos fuertes del V50 con su cámara principal de 50 MP firmada por ZEISS. Las fotos salen nítidas y bien iluminadas gracias a la estabilización óptica y autoenfoque. Además, el modo noche cumple su promesa. Sin embargo, si buscas hacer zoom… aquí hay margen para mejorar.
Pero hablemos también de la batería: ¡menuda maravilla! Con 6.000 mAh, la autonomía se hace notar; puedes pasar días sin cargarlo incluso usando aplicaciones intensivas. Y si te quedas sin batería… ¡no te preocupes! La carga rápida a 90 W hará que vuelvas a estar operativo en nada.
En resumen, el vivo V50 5G es una opción sólida si buscas algo fiable y con buenas prestaciones sin romperte la cabeza buscando en otros modelos. ¿Te animas a probarlo?