En el corazón de las Islas Baleares, la Grossa de Nadal ha dejado huella este año con premios que hacen soñar a más de uno. ¿Te imaginas recibir un buen pellizco? Pues eso es lo que ha pasado: un tercer premio y dos quintos se han repartido entre los afortunados isleños, llenando de alegría a muchas familias. Sin duda, una buena manera de encarar el nuevo año.
Pero no todo es felicidad
A pesar del festín económico que supone la lotería, hay otros temas en la agenda que nos preocupan. En Palma, la tala de bellaombres ha encendido los ánimos. Muchos se preguntan si realmente había razones tan urgentes como para tirar a la basura estos árboles emblemáticos. Expertos y biólogos han puesto en duda las afirmaciones oficiales sobre enfermedades y riesgos inminentes. ¿Intereses económicos detrás de esta decisión? La comunidad quiere respuestas.
Además, hemos visto cómo nuestro territorio se transforma a pasos agigantados; el suelo artificial crece un 65%. Un dato alarmante que nos invita a reflexionar sobre el futuro del paisaje balear.
Mientras tanto, la nieve ha hecho su aparición en el Puig Major, cubriendo Mallorca con su manto blanco y recordándonos que, aunque haya turbulencias, siempre hay espacio para la belleza natural.

