Hoy nos despedimos de Anthony Bonner, una figura emblemática que ha dejado huella en el corazón de muchos. A sus 97 años, este gran lul·lista y expresidente del GOB se ha ido, pero su legado seguirá vivo entre nosotros. En cada rincón de Mallorca, su voz resonaba como un eco de esperanza por un futuro más sostenible.
Un referente inolvidable
Bonner no solo era conocido por su pasión por la cultura y el medio ambiente; era un verdadero referente para todos los que luchamos por preservar nuestra tierra. Su compromiso con la naturaleza y el lulisme fue inquebrantable. Participó activamente en numerosas iniciativas, siempre buscando alternativas al monocultivo turístico que amenaza nuestra identidad.
Nos quedamos con recuerdos de sus intervenciones en foros y gales, donde su energía iluminaba cualquier sala. Como dice su hermana Neus Sánchez: «Siempre estaba presente, él era el alma de las fiestas». Es difícil imaginar cómo será el futuro sin su presencia carismática y llena de vida.
Aunque hoy sentimos una profunda tristeza por su partida, recordemos sus enseñanzas. Sigamos adelante, trabajando juntos para honrar su memoria y continuar luchando por una Mallorca más verde.

