En la última década, el costo de la vivienda en España ha subido más de un 40%, pero lo que ocurre en las Baleares es aún más alarmante: ¡casi el doble! Las familias están viendo cómo sus sueños de tener un hogar propio se convierten en una misión casi imposible. Este incremento no solo afecta a los precios, sino que también hemos visto cómo el importe de las hipotecas ha crecido un 70% en este mismo período. ¿Qué está pasando con nuestra sociedad?
Protestas y realidades
Las protestas han comenzado a resonar con fuerza. En Son Bordoy, familias enteras salieron a la calle para decir basta a los desahucios. «Queremos vivir como personas, no en la calle», gritaban entre pancartas y lágrimas. Es desgarrador ver cómo muchos se ven obligados a abandonar sus hogares mientras los precios siguen subiendo sin control.
En medio de esta crisis habitacional, nos encontramos ante un panorama donde el cambio climático también está afectando nuestras vidas. Las soluciones parecen lejanas y cada vez más complicadas; incluso se habla de modificar el calendario escolar por culpa del clima. Mientras tanto, otros temas importantes como el desarrollo urbano o iniciativas digitales se quedan atrás frente a esta urgencia vital.
No podemos olvidar que hay una lucha constante contra las injusticias sociales que enfrentamos día tras día. La situación es crítica y nosotros somos quienes debemos alzar la voz para exigir cambios reales que garanticen un futuro digno para todos.

