La tarde en Son Moix comenzó como cualquier otra, llena de emoción y expectativas. Sin embargo, un accidente desafortunado cambió el ambiente. Un aficionado alemán sufrió una caída desde la grada durante un partido, dejando a todos preocupados por su bienestar. La escena fue tensa; muchos se agolpaban alrededor mientras los servicios médicos acudían rápidamente al rescate.
Preocupación y solidaridad en las gradas
La comunidad se unió en ese instante crítico, intercambiando miradas de preocupación. Nos duele ver cómo algo tan simple como disfrutar de un partido puede dar un giro inesperado. Este incidente nos recuerda lo frágil que es todo; estamos allí para apoyarnos, pero a veces la realidad nos sacude. Esperamos que el hombre se recupere pronto y pueda volver a disfrutar del fútbol como antes.