La mañana comenzó como cualquier otra en Palma, pero pronto se tornó en caos cuando un autobús de la EMT colisionó con un vehículo todoterreno. En cuestión de segundos, el ruido del impacto resonó por las calles, dejando a cinco personas heridas y a muchos más conmocionados.
El accidente ocurrió en una de esas intersecciones donde el tráfico es habitual y donde todos creíamos que había control. Sin embargo, parece que esta vez la suerte no estuvo del lado de los viajeros. Los testimonios recogidos son desgarradores; “no sabía si reír o llorar, fue todo tan rápido”, nos dice uno de los pasajeros que tuvo que ser atendido en el lugar.
Una situación alarmante
No podemos olvidar lo preocupante de esta situación: cada vez son más frecuentes los accidentes en nuestras calles. La gente está cansada. ¿Hasta cuándo vamos a permitir que sucedan estas tragedias? Es hora de exigir soluciones reales y no solo promesas vacías. La seguridad debe ser nuestra prioridad y no podemos seguir tirando a la basura vidas por falta de medidas efectivas.
Mientras tanto, las víctimas reciben atención médica y esperemos que se recuperen pronto. Pero esto no puede quedar así; debemos reflexionar sobre lo ocurrido y cuestionar qué está fallando realmente en nuestro sistema de transporte público. No dejemos que este accidente sea solo otro número más en las estadísticas.