La política en Porreres está que arde. La reciente renuncia del regidor de MÉS, acusado de realizar obras ilegales en suelo rústico, ha dejado a la comunidad con más preguntas que respuestas. Este escándalo no solo sacude el ayuntamiento, sino que también refleja un problema más profundo en nuestra sociedad: la falta de transparencia y responsabilidad.
Un asunto que nos toca a todos
Los vecinos, que han visto cómo su entorno se transforma sin previo aviso, sienten el peso de esta situación. “¿Hasta cuándo vamos a permitir que tiren a la basura nuestro patrimonio?”, se pregunta una residente visiblemente indignada. Y es que este tipo de decisiones afectan directamente a la calidad de vida y al futuro del municipio. Las críticas no tardaron en surgir, poniendo sobre la mesa un debate necesario sobre el uso del suelo y las prioridades urbanísticas.
Porreres merece más, merece una gestión que respete su esencia y sus recursos. ¿Qué pasará ahora? La comunidad espera respuestas claras y acciones contundentes para evitar que esto se repita. No podemos permitir que los intereses particulares por encima del bien común sigan marcando la pauta en nuestras vidas.