Más de 60 vecinos de Son Sardina se han reunido, preocupados y algo indignados, para hablar sobre la nueva ley que el PP y Vox están intentando colar. Esta normativa permitiría construir en terrenos rústicos en Palma, un auténtico despropósito que podría llevar a una verdadera macrourbanización. ¿Quiénes vivirán aquí? Sin servicios ni equipamientos necesarios, esto es simplemente tirar a la basura nuestro entorno.
Un grito por el futuro de nuestro barrio
Los vecinos no se quedan callados. “No podemos permitir que destruyan lo que hemos construido con tanto esfuerzo”, dice uno de ellos con voz firme. Se sienten traicionados por decisiones políticas que parecen más interesadas en llenar bolsillos ajenos que en cuidar el bienestar de la comunidad. Este tipo de propuestas no solo amenazan nuestro estilo de vida, sino también el futuro del entorno natural que nos rodea.
A medida que los rumores sobre esta ley se propagan, muchos se preguntan: ¿realmente estamos dispuestos a sacrificar nuestra calidad de vida por unos cuantos edificios más? La respuesta parece clara entre los presentes: ¡no! Son tiempos difíciles y es momento de alzar la voz para defender lo nuestro.