La realidad de las Balears se presenta cada vez más complicada, y el descontrol que estamos viviendo con las galeras en Palma es un claro ejemplo. ¿Qué está pasando realmente con estas embarcaciones? Es un tema del que todos deberíamos hablar. A diario, se escuchan historias de personas que llegan en patera, buscando una vida mejor, pero la situación actual es alarmante.
Un grito de alerta
Desde hace tiempo, los ciudadanos venimos advirtiendo sobre este problema. La falta de control es evidente y parece que nadie está dispuesto a poner solución. Nos preguntamos: ¿dónde están los responsables? Los balearicos nos hemos acostumbrado a ver cómo nuestro entorno se transforma, y no siempre para bien.
Es triste ver cómo nuestras islas, que deberían ser un refugio para todos, se convierten en un lugar donde el caos reina. ¡Basta ya de tirar a la basura la esperanza de quienes llegan! Este monocultivo turístico nos lleva a olvidar lo esencial: cuidar nuestra tierra y sus gentes.