El pasado fin de semana, el Running & Wine Fest reunió a 850 apasionados del deporte y el buen vino en una celebración que combinó lo mejor de ambos mundos. Imagina esto: deporte, música y vino, todo en un mismo lugar. Suena bien, ¿verdad? Y es que este festival no solo atrajo a corredores; también se llenó de gente deseosa de disfrutar y compartir experiencias.
Un evento para recordar
A medida que los participantes cruzaban la línea de meta, las sonrisas eran contagiosas. La alegría se respiraba en el ambiente. Algunos comentaban entre risas sobre cómo había sido su recorrido mientras otros ya planeaban qué copa de vino elegirían después. Y es que no hay nada mejor que relajarse con amigos tras una buena carrera.
No obstante, no todo fue un camino de rosas; hubo quienes criticaron la falta de opciones para los más pequeños o la escasez de actividades paralelas. Sin embargo, eso no empañó el ambiente festivo. Lo importante aquí es que esta primera edición ha dejado huella y prometen repetirlo el próximo año con muchas más sorpresas.