En un reciente estudio, la Universitat de les Illes Balears (UIB) ha sido señalada como una de las universidades públicas peor valoradas por los estudiantes españoles. ¿Cómo hemos llegado a este punto? La realidad es que muchos alumnos se sienten desilusionados con su experiencia académica, lo que plantea serias preguntas sobre el futuro de esta institución.
La voz de los estudiantes
A medida que se difunden estas cifras, no podemos ignorar la frustración palpable entre los jóvenes. Alumnos que han puesto sus sueños en manos de una educación superior que parece no cumplir con sus expectativas. “No sé si volvería a elegirla”, comparte uno de ellos. Esa declaración resuena con fuerza y nos invita a reflexionar sobre qué está fallando.
Las deficiencias en la calidad educativa y la falta de atención al estudiante son críticas recurrentes. Además, muchas voces se alzan contra un sistema que parece haber caído en el monocultivo turístico, priorizando ciertos intereses antes que el bienestar académico real.
No podemos quedarnos callados ante esta situación. Es hora de que las autoridades escuchen a aquellos que viven día a día dentro del campus y comiencen a trabajar para revertir esta tendencia. La comunidad universitaria merece más, ¡y nosotros también!