En un giro inesperado, Alcúdia ha visto cómo la carretera se convertía en un escenario de desgracia, marcando un récord escalofriante: 21 accidentes de tráfico en solo siete días. La semana pasada, lejos del bullicio turístico que suele reinar en la zona, los siniestros aumentaron como si se tratara de una pesadilla que nadie podía detener.
La Policía Local, que había estado lidiando con apenas dos incidentes durante la Semana Santa, se encontró abrumada. Comparar esos números es como ver dos caras de una misma moneda: de los 13 accidentes registrados en la semana anterior (incluyendo uno trágico donde un participante del Mallorca312 perdió la vida) a este alarmante aumento. Y eso nos hace preguntarnos: ¿qué está pasando realmente?
Un cóctel peligroso en las carreteras
Desde el choque grave entre un coche y un camión en la carretera MA-13 hasta los múltiples siniestros menores que ocurrieron incluso el mismo lunes 28, parece que el asfalto ha hablado. El pasado domingo fue especialmente negro, con ocho accidentes reportados. Esta cifra resuena como un grito de alerta para todos nosotros.
A pesar del caos, hay algo positivo entre todo este descontrol: los positivos por alcoholemia han disminuido significativamente. Solo dos conductores fueron sorprendidos bajo los efectos del alcohol en comparación con las cifras habituales de 8 a 10 durante esta época del año. Pero esto no debería hacernos sentir más tranquilos; lo importante aquí es reflexionar sobre lo que está sucediendo y tomar cartas en el asunto antes de que sea demasiado tarde.