La vida en las afueras de Palma se presenta como una alternativa fresca para quienes buscan un hogar sin dejarse la piel en el intento. Hablamos de Establiments y Son Sardina, dos barrios que están ganando terreno en el mercado inmobiliario balear, aunque a un coste que sigue siendo elevado.
A día de hoy, hacerse con un piso de 90 metros cuadrados puede costar alrededor de 346.410 euros. No es moco de pavo, especialmente cuando sabemos que el mercado no da tregua y los precios continúan su escalada. De hecho, estos rincones han visto cómo sus precios se revalorizan un 9,9% respecto al año pasado. Pero, ¿qué hay detrás de estas cifras?
Un refugio con historia y naturaleza
Establiments no es solo un barrio más; es un lugar con personalidad propia. Con una conexión única entre lo urbano y lo rural, este enclave ha sabido conservar su esencia a pesar del crecimiento de Palma. Anteriormente parte del municipio de Esporles hasta 1919, Establiments guarda celosamente vestigios arqueológicos como los restos talayóticos o las cuevas de Son Bauçà. Aquí la tradición agrícola musulmana todavía se respira en sus sistemas de regadío y fuentes históricas.
A quien le gusta disfrutar del aire puro sin alejarse demasiado del bullicio citadino encontrará aquí su sitio ideal. Además, la presencia de fincas históricas añade un encanto especial al paisaje local.
Por otro lado, Son Sardina destaca por su fuerte sentido comunitario. Los vecinos son auténticos defensores de su barrio y no dudan en alzar la voz cuando consideran que falta algo: más espacios públicos y equipamientos sociales son algunas de sus principales demandas. Lleva años esperando mejoras que faciliten actividades culturales y deportivas sin tener que trasladarse al centro.
La mezcla perfecta entre tranquilidad rural y accesibilidad a los servicios urbanos hace que cada vez más personas se fijen en esta zona para establecerse. Sin embargo, hay que recordar que el mercado inmobiliario balear sigue siendo uno de los más tensos del país. La presión turística y la demanda internacional dejan a muchos locales luchando por encontrar una vivienda asequible.